Benedict Anderson y sus naciones "imaginadas"
Xavi Vilareyo
Benedict
Anderson es un estudioso-crítico del fenómeno del nacionalismo, su origen y
difusión. Nació en 1936 en China de padre irlandés y madre inglesa, se crió en
California y estudió en Cambridge, por ello él mismo tiene dudas sobre su
propia identidad nacional. Su situación es muy similar a la de muchos ingleses
que viven en países anglófonos como Estados Unidos o a la de tantos emigrantes
españoles en países hispanoamericanos, que con los años no sabrían muy bien
identificarse con uno u otro país, sino más bien con una mezcla de ambos. Su
libro Comunidades imaginadas (1983)
es de los más estudiados sobe el tema en muchas universidades. Afirma que ni el marxismo ni el capitalismo analizaron ni entendieron correctamente el fenómeno del nacionalismo.
Anderson afirma que actualmente vivimos uno
de los auges del nacionalismo a todos los niveles, no sólo en las naciones
pequeñas o que se reivindican como tales sino también en los grandes
estados-nación y en las llamadas comunidades transnacionales como los judíos,
tamiles o sijs.
Anderson se apunta a las tesis modernistas
que afirman que los nacionalismos surgen a fines del siglo XVIII impulsados por
la prensa escrita y por la literatura y que en realidad el nacionalismo como
instrumento de construcción nacional nació en América con la independencia de
las colonias del norte y de los estados criollos latinoamericanos del sur.
Anderson
define nación como una comunidad política imaginada como inherentemente
limitada por unas fronteras y soberana. Imaginada en el sentido de creada o
construida socialmente. La nación se concibe siempre como un compañerismo
profundo, horizontal.
Anderson analiza el nacionalismo desde la
visión del materialismo histórico que puede ser contrastada con la visión
weberiana de Liah Greenfeld en Nacionalismo:
cinco rutas a la modernidad. Anthony Smith también criticó las tesis
creacionistas y modernistas de Anderson afirmando que muchas naciones poseen
elementos premodernos, es decir, elementos étnicos o culturales anteriores al
proceso de modernización o nacionalización (etnosimbolismo).
Benedict Anderson se vanagloria de ser uno
de los pocos investigadores del nacionalismo que no lo ve como una cosa
"fea". Acusa a Gellner y a Hobsbawm de ser analistas hostiles al
nacionalismo y por ello imparciales. Anderson por el contrario piensa que el
nacionalismo puede ser una ideología atractiva. Valora el elemento utópico del
nacionalismo. El nacionalismo también obliga a un buen comportamiento y
contribuye a una mejor sociedad, hace que la gente se comporte mejor porque son
miembros de una misma sociedad común. Pero por otro lado Anderson se pregunta
qué significa pertenecer a una nación incluso si seguimos necesitando
identificarnos con un estado nacional. Habla sobre nuevas formas de
nacionalismo gracias a Internet y los vuelos baratos, en procesos transnacionales
o de nueva inmigración. Se queja con impotencia de que el
"cosmopolitismo" (ciudadano del mundo) en realidad no existe, todos
pertenecen más o menos a alguna nación.
Anderson critica por ejemplo el nacionalismo
de los inmigrantes que no se integran en el país de acogida. Critica duramente
por ejemplo a los noruegos que pasan los inviernos en España montando escuelas
noruegas para sus hijos en lugar de llevarlos a escuelas españolas. Ello lo
achaca a un exceso de nacionalismo (noruego). También ve exceso de nacionalismo
en los sijs, judíos o tamiles repartidos por todo el mundo que se empeñan en
mantener a toda costa sus identidades.
¿Está
realmente viendo Benedict Anderson la situación del mundo con una lente
deformada? ¿Es cierto como él afirma que ya no somos tan cosmopolitas como lo
éramos antes? ¿A quién o a quiénes se está refiriendo con esta afirmación? Las
preocupaciones antropológicas de Anderson son qué se siente teniendo dos
pasaportes y los fenómenos nuevos de la doble nacionalidad. Anderson se siente
siempre entre dos o tres aguas. Con un padre irlandés y una madre inglesa
siempre será difícil la elección. Como la duda existencial de si poner una sola
vela a Jesucristo o a María santísima...
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